La caída de las ventas en el mes de enero en muchos comercios certifica el cambio de percepción de las rebajas. Desde el sector atribuyen las causas al actual modelo de rebajas, a las promociones permanentes y el auge del comercio electrónico. También hay quien piensa que esta bajada del consumo en las rebajas podría ser una causa coyuntural, determinada por la situación política y económica del país.
El hecho de que un cliente pueda encontrar productos rebajados todo el año saca el interés de los periodos de rebajas. Actualmente, el cliente es muy exigente y en periodos de rebaja sólo comprará si lo necesita o si se enamora del producto. Entonces el comerciante tiene que poner el mismo esfuerzo en vender una pieza a precio normal que a precio rebajado. Toda esta nueva política provoca confusión entre consumidores y comerciantes. Desde HelpMyShop creemos que el nuevo calendario de comercio no favorece en absoluto el pequeño comercio que constantemente ve como caen sus márgenes comerciales. Actualmente estamos en un periodo de descuentos liberalizado donde los comercios tienen autonomía para decidir los periodos en los que ofrecen sus rebajas. Muchas tiendas se anticipan al arranque tradicional y ofrecen ofertas desde los primeros días del año. Este hecho, sumado al peso cada vez más importante del Black Friday y Cyber Monday, que se convierten en la antesala de la campaña de Navidad, da lugar a que el periodo de las compras por excelencia se extienda desde finales de noviembre a principios de marzo y las ventas se distribuyan a lo largo del calendario.
Asimismo, otro factor es que los datos del comercio electrónico no dejan de ascender. El pequeño comercio tiene que encontrar la manera de utilizar este nuevo canal de venta como un aliado y no un competidor.
En definitiva, estamos en momentos de cambios comerciales. Y este cambio es profundo. Han variado los modelos comerciales, las promociones y el calendario. También los hábitos y las demandas de los consumidores. Y todo esto afecta las rebajas que ya no son lo que eran. Entonces, ¿qué solución podemos aportar? En primer lugar, una remodelación del calendario comercial que favoreciera al pequeño comercio y se adaptara a las necesidades del nuevo consumidor. Y en segundo lugar, los comerciantes deben abrir la mente a afrontar otras maneras de vender y fidelizar a los clientes.
El comercio ha evolucionado y si tienes un establecimiento flexibiliza tu manera de gestionar tu negocio adaptándote a las nuevas necesidades del mercado.